‘A FOOT IN THE DOOR – THE BEST OF PINK FLOYD’
SUS MEJORES GRABACIONES POR PRIMERA VEZ EN FORMATO DOBLE VINILO
SUS MEJORES GRABACIONES POR PRIMERA VEZ EN FORMATO DOBLE VINILO
YA
A LA VENTA ESTE VIERNES 28 DE SEPTIEMBRE
Crónica extensa
Hoy se
publica el compilatorio “A Foot In The
Door” por primera vez en soporte vinilo, una
colección de temas clásicos de Pink
Floyd, elegidos por los miembros de la banda. El título de este álbum, fue dado por el propio Roger Waters...¿Una esperanza para sus fans?.
Durante 53 años, los Floyd ha sido parte
del paisaje del rock. Su posición cerca de la cima de esa colina de la fama, solo
se ha vuelto más baja con el tiempo. 2011
marcó el comienzo del '¿Por qué Pink Floyd?' un proyecto de reedición que continuo hasta 2012, y 'A Foot in
the Door' fue una compilación en un solo disco compacto de lo mejor de esa
campaña.
Como sugiere el título “The Best Of Pink
Floyd”, este álbum trata de cubrir una gran cantidad de terreno en poco
tiempo. Quizás no es suficiente para despertar el apetito por esta gran banda.
Desde el brillo inicial de 'See Emily Play' hasta uno de sus
últimos intentos de grandeza, como en 'High Hopes', obtenemos un
vistazo quizás demasiado breve o extenso, según se mire, sobre lo que hizo esta banda tan fascinante
para tantas generaciones. Unos Pink Floyd ya finiquitados, no así como
su marca comercial y empresarial.
Las canciones no se ejecutan cronológicamente, que hubiera sido lo lógico para
el caso, pero de alguna manera, esto puede ayudar a la causa del
adoctrinamiento hacia el nuevo oyente. Al mezclar el orden, se quita el foco de una
era particular determinada de la banda y se dirige únicamente a las canciones.
Este viaje, comienza de una manera inquietantemente con 'Hey You' de su álbum 'The Wall', luego cambian de tema en un abrir y cerrar de ojos a la de los primeros años en technicolor sicodélico con el segundo sencillo de la banda, la ya mencionada canción See Emily Play. Es uno de los mejores singles que se hayan hecho, pero desafortunadamente es la única canción incluida en la era de la banda con Syd Barrett. Solo tres minutos de duración, es solo un destello de la paleta de colores utilizados durante el primer capítulo comandado por el genial Syd Barrett.
Entonces,
¿qué más tenemos aquí? Bueno, los conocidos hits de siempre como “Another Brick In The Wall; Part II”,
“Money”, “Wish You Were Here” y “Comfortably Numb” que parecen
obligatorias sus apariciones en cualquier compilación sobre la banda. Pero
ninguna de estas canciones, explora la parte más salvaje e interesante de la
banda en el terreno compositivo y sónico que no aparecen en este compilatorio.
En realidad,
nada antes de “Dark side of The Moon”, salvo “Emily Play”, se
encuentran aquí. Grandes totems como “A
Saucerful of Secrets”, “Set The Controls For The Heart of The Sun”, o
el hipnotico paisaje de “Echoes” o piezas del album “Obscured
By clouds”. Tampoco,
y extrañamente, nada del “Animals” que muy pronto tendrá una edición
ajustada a su grandeza y mitificación.
Con tal historia, incluso una colección de discos dobles apenas podría rayar la superficie, pero limitarla a un solo disco en compacto e incluir el mismo lote de canciones que puede escuchar todos los días en cualquier emisora de radio con rock clásico, puede sonar algo mezquino.
Dicho esto y
no obstante, las canciones, incluso aquellas que hemos escuchado una y otra
vez, suenan increíbles en esta doble edición en vinilo. Las pistas recién
remasterizadas brillan muy bien tras el paso de la aguja del tocadiscos por
este vinilo de 180 gramos. El sonido es mucho más amplio, abierto, claro y
brillante que en el propio compacto de siete años atrás.
Las
pistas han sido recientemente remasterizadas para vinilo por el veterano James Guthrie, con Joel Plante, y la colaboración de Bernie Grundman en Los Ángeles, California. Esta edición doble
vinilo presenta una versión de "Time",
con la intro de los relojes restaurados, tras haber sido omitidos en la versión
CD.
El
diseño original de la carpeta ha sido modificado por el director creativo de
Pink Floyd, Aubrey Powell, de Hipgnosis y Peter Curzon, para incluir versiones alternativas de las
fotografías utilizadas en la versión original del CD. La
presentación del doble vinilo es simplemente espectacular, y se agradece las
fundas interiores que guardan los dos vinilos.
En su
conjunto, la carpeta con sus diversas fotografías, imitando a la portada de “A Nice Pair”, tienen un brillo
espectacular que hace de esta edición por primera en vinilo, ser uno de los grandes lanzamientos
de este año de Pink Floyd. Este es el álbum perfecto de Pink Floyd para fans devotos
y para aquellos que descubren su música por primera vez.
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