No hay nada más fácil
que culpar a Roger Waters de todos
los males de Pink Floyd y de echar a
Rick Wright de la formación. Tiene
un carácter difícil y una enorme megalomanía. Sin embargo, quizá la historia no
sea tal y como la cuentan.
Hacer de abogado del diablo es peligroso. Pero
no hay nada más rock and roll que defender a ese adorable rojillo con cuernos y
rabo. ¿Qué esconden realmente las grietas del muro más polémico del rock?.
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descubrirlo, hazte con este ejemplar del This
Is Rock en el siguiente enlace:
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